La Red de Blogs Comunistas (RBC) ha traducido un comunicado del Partido Comunista de la India (Maoísta) de finales del pasado año, aunque publicado reciéntemente, en el cual se condena el asesinato a sangre fría del camarada Kuppusamy, miembro del Comité Central y Secretario del Comité Especial de Zona de las Ghats Occidentales, y de la camarada Ajitha, miembro del Comité Especial de Zona y encargada del movimiento urbano en Tamil Nadu, que fueron detenidos y asesinados brutalmente por las infaustas fuerzas mercenarias locales y estatales cerca de la aldea de Kalkulam, al servicio del fascismo hindú.
En el comunicado se condena igualmente el colaboracionismo del revisionista Partido Comunista Marxista (PCM), que gobierna en Kerala, dirigido por Pinarayi Vijayan, que, mientras la población indígena y las masas sufren la represión del fascismo hindú "se dedica a hacer teatro, aclamando, por un parte, al líder revolucionario cubano Fidel Castro tras su muerte y organizando actos de conmemoración por todo el estado y, por otra, yendo de la mano del gobierno central nacional-hinduista-fascista de Narendra Modi para cortar de raíz el ascendiente movimiento revolucionario que dirige el PCI (Maoísta)".
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PARTIDO COMUNISTA DE LA INDIA (MAOÍSTA)
COMITÉ CENTRAL
15 de diciembre de 2016
¡CONDENAR LOS BRUTALES ASESINATOS DE CAMARADAS KUPPUSAMY Y AJITHA!
El 24 de noviembre de 2016, el camarada Kuppusamy, miembro del Comité Central y Secretario del Comité Especial de Zona de las Ghats Occidentales, y la camarada Ajitha, miembro del Comité Especial de Zona y encargada del movimiento urbano en Tamil Nadu, fueron detenidos vivos y asesinados brutalmente por las infaustas fuerzas mercenarias locales y estatales cerca de la aldea de Kalkulam, en la zona boscosa de Nilambur, en el distrito de Malappuram, en el estado de Kerala. La policía, como es habitual en estos casos, afirmó que “una patrulla de las fuerzas especiales fue atacada por los maoístas. En respuesta, las fuerzas policiales se vieron obligadas a hacer uso de sus armas y dos personas resultaron muertas”. Lejos de ser así, se trató, en el marco de las políticas de conflicto de baja intensidad, de una ejecución perfectamente planificada de dos dirigentes cuya finalidad es liquidar el Partido maoísta. Debido a los problemas de salud de los camaradas mártires, el pelotón nadugani había acampado en esa zona con muy pocos efectivos. Cientos de miembros de las fuerzas especiales fuertemente armados atacaron el campamento, capturaron a ambos camaradas vivos, los torturaron y los asesinaron brutalmente. Después de este incidente, la policía desencadenó una inusual campaña de terror y de propaganda goebbelsiana contra el Partido maoísta por toda Kerala, amenazando a la población local para que no apoye a los maoístas. También han amenazado a los familiares de los camaradas mártires. Los periodistas y los activistas de derechos humanos que están tratando de esclarecer la verdad también han sido agredidos e incluso a algunos se les ha expulsado de la zona.
Mientras tanto, el revisionista Partido Comunista Marxista (PCM), que gobierna en Kerala y dirige el fascista Pinarayi Vijayan, se dedica a hacer teatro, aclamando, por un parte, al líder revolucionario cubano Fidel Castro tras su muerte y organizando actos de conmemoración por todo el estado y, por otra, yendo de la mano del gobierno central nacional-hinduista-fascista de Narendra Modi para cortar de raíz el ascendiente movimiento revolucionario que dirige el PCI (Maoísta) en la zona trifronteriza de las Ghats Occidentales. Sueñan despiertos si se piensan que podrán acabar con el movimiento revolucionario matando a sus dirigentes. Un partido revolucionario no desaparece por la muerte de sus dirigentes porque su guía es la teoría científica del marxismo-leninismo-maoísmo. Olvidan la amarga lección que recibieron del pueblo de Midnapore, en Bengala Occidental. Intentan evitar que las masas oprimidas avancen por la senda revolucionaria. Llegará sin duda el día en que el pueblo les dará su última lección. Pronto caerán los elementos antipopulares.
El camarada Kuppusamy (Manju, Prasad) nació en el seno de una familia dalit, pobre y oprimida, en el distrito de Krishnagiri, en el estado de Tamil Nadu. Tras terminar sus estudios, trabajó en la empresa L&T en Bangalore, en el estado de Karnataka. Entró en contacto con el Partido en 1979-80. Era uno de los miembros del núcleo dirigente del antiguo partido PW [“Guerra Popular”] de Karnataka. Éste, más tarde, se transformó en Comité Estatal, del que formó parte el camarada Kuppusamy. Como dirigente, organizó a las masas de Karnataka en diferentes asuntos. En especial se consagró a la tarea de organizar a los trabajadores y a las amplias masas de oprimidos de la ciudad de Bangalore y de sus alrededores. En 1992, se mantuvo firme al lado del Partido en la lucha contra el oportunista Kondappalli Seetharamaiyya, antiguo secretario del otrora Partido Guerra Popular. Fue elegido secretario del Comité Estatal de Karnataka en 1993, miembro del Comité Central en el IX Congreso de 2001 y reelegido en el Congreso de la Unificación de 2007, celebrado tras la fusión del PCI (Maoísta). Trabajó como miembro de la oficina regional del suroeste y desarrolló el Partido en los estados meridionales. Defendió muy especialmente las aspiraciones nacionales del pueblo tamil en Sri Lanka. Analizó brillantemente la derrota de los Tigres de Liberación de Eelam Tamil (LTTE) desde una perspectiva marxista y trató de organizar un amplio movimiento de solidaridad con ellos. Se entregó a la tarea de dinamizar el movimiento revolucionario en los estados del sur del país, algo estancada, y desempeñó un papel importante en la lucha contra la línea oportunista que se había convertido en un obstáculo en Karnataka y Tamil Nadu, reconduciendo el Partido hacia el camino revolucionario. Defendió firmemente el marxismo-leninismo-maoísmo en situaciones de extraordinaria complejidad, en medio de vueltas y revueltas, de altibajos y hasta de la traición de renegados opuestos al desarrollo del movimiento revolucionario en el sur de la India, donde el camarada Kuppusamy se atrevió a abrir un frente de guerra en la zona trifronteriza de las Ghats Occidentales. Contribuyó activamente a la unión de todas las auténticas fuerzas revolucionarias y desempeñó un papel importante la fusión del PCI (Maoísta) y el PCI Marxista-Leninista (Naxalbari). Fue un intelectual revolucionario del proletariado que, a diferencia de los intelectuales burgueses, se elevó desde la condición de oprimido.
La camarada Ajitha (Kaveri) nació en Chennai, en Tamil Nadu. Entró en contacto con el Partido a principios de los años 90 y fue dirigente de la organización de mujeres Tamil Nadu Pennurimai Kazhagam. Dirigió muchas luchas contra la violencia sobre las mujeres e incorporó a muchas de ellas al camino revolucionario. Cuando el Partido en Tamil Nadu sufrió graves pérdidas en 2002, pasó a la clandestinidad y comenzó a dirigir las organizaciones urbanas de masas. En especial, participó activamente en la organización de varios conflictos sindicales. Desempeñó un papel destacado en la lucha contra la línea oportunista que surgió en Tamil Nadu. Aunque su compañero se sumó a la línea oportunista y abandonó el combate, Ajitha se mantuvo firme al lado del Partido. Ajitha Luchó implacablemente contra la dominación masculina tanto dentro como fuera del Partido. Tras la caída de 4 miembros del Comité Especial de Zona en Coimbatore, la policía intentó detenerla varias veces. De acuerdo con las directrices del Comité Especial de Zona, Ajitha permaneció en la selva, dirigiendo el movimiento urbano.
Camaradas,
A día de hoy, cientos y cientos de miles de personas luchan por todo el país contra las políticas antipopulares de gobierno central del fascista Modi, respaldado por el fascismo brahmánico-hinduista. Todas esas personas están tomando clara conciencia de que el PCI (Maoísta) es el único partido revolucionario que puede liberar a las masas trabajadoras de la espantosa situación social en que viven. Los oprimidos de todo el país están cada vez más organizados bajo la dirección del PCI (Maoísta), razón por la que las clases dominantes han venido adoptando diversas tácticas represivas y propagandísticas con el fin de liquidar al Partido. Incluso han pretendido apaciguar todo tipo de luchas populares y democráticas, desviando la atención del creciente descontento social. Es cierto que el martirio de los dos camaradas dirigentes, Kuppusamy y Ajitha, es una grave pérdida no sólo para el movimiento de las Ghats Occidentales, sino también para el resto del país. Pero un partido revolucionario siempre supera las pérdidas. Estos dos dirigentes ejemplares entregaron sus vidas inestimables en pos de la liberación de las masas trabajadoras del hambre, la pobreza y la opresión. Vivieron y sacrificaron sus vidas por la noble causa del Comunismo, por los ideales de una sociedad sin clases. Una vez más mostraron el camino glorioso de nuestros mártires, su compromiso para con la Causa y el pueblo, su desinterés, su nadar a contracorriente, su disposición a soportar cualquier privación, su espíritu bolchevique. Y lo demostraron cuando los gobiernos fascistas central y estatal desplegaban sus infames fuerzas para aplastar el floreciente movimiento revolucionario en la zona trifronteriza de las Ghats Occidentales. Su sacrificio no será en vano. La roja bandera revolucionaria lo es cada vez más por la sangre derramada de miles de mártires heroicos en el curso de la lucha contra el enemigo. El pueblo y la guerrilla darán resuelto cumplimiento a los sueños de nuestros mártires con la debida respuesta al enemigo. El Comité Central de PCI (Maoísta) condena enérgicamente los brutales asesinatos de los camaradas Kuppusamy y Ajitha, y llama a los trabajadores, campesinos, estudiantes, jóvenes, intelectuales, a las nacionalidades oprimidas y a los sectores oprimidos de la sociedad, incluidos los dalits, los adivasis y las minorías religiosas, a condenar los falsos enfrentamientos, que no son sino brutales asesinatos, y a unirse y organizarse con la suficiente amplitud y fuerza para hacer frente por todos los medios posibles a la ofensiva de la clase dominante.
Saludos revolucionarios,
Abhay
Portavoz,
Comité Central
PCI (Maoísta)
1 comentario:
DEP
Está claro que todos los países en todo el mundo usan las mismas técnicas de represión y terror. La propaganda estatal, convierte más tarde a las víctimas en agresores y a los terroristas en agredidos.
Un saludo.
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