En 1925, Stalin resumía bien en un artículo en el diario Pravda el significado del Día Internacional de la Mujer para los comunistas, de enorme validez todavía hoy ante los esfuerzos del feminismo burgués de alejarlo de su intrínseca relación con lucha de clases, con la lucha contra toda explotación, y por otro lado, de los que reniegan de su importancia ninguneándolo.
Los comunistas tienen la obligación de ganar a las mujeres trabajadoras para la lucha por el Socialismo y, por ello, repitiendo las certeras palabras, "El Día Internacional de las Mujeres es un medio para llamar a la reserva, constituida por mujeres trabajadoras, que se posicione del lado del proletariado".
¡Viva el Día Internacional de las mujeres!
Con motivo del Día Internacional de la Mujer (Stalin, "Pravda", 1925)
El Día Internacional de las Mujeres es el testimonio de la invencibilidad y el presagio de un gran futuro del movimiento liberador de la clase obrera.
Las mujeres y trabajadoras, las obreras y campesinas, constituyen la gran reserva de la clase obrera. Esta reserva representa a una buena mitad de la población. ¿Estará la reserva femenina con la clase obrera o contra ella? De eso dependen el destino del movimiento proletario, la victoria o derrota de la revolución proletaria, la victoria o derrota del poder proletario. Por eso, la primera tarea del Partido y de su destacamento más avanzado, el Partido comunista, consiste en llevar a cabo una lucha decisiva para liberar a las mujeres, obreras y campesinas, de la influencia de la burguesía, para educar políticamente y organizar a las obreras y campesinas bajo la bandera del proletariado.
El Día Internacional de las Mujeres es un medio para llamar a la reserva, constituida por mujeres trabajadoras, que se posicione del lado del proletariado.
Pero las mujeres trabajadoras no sólo son una reserva. Pueden y deben convertirse –con una política justa de la clase obrera- en un verdadero ejército de la clase obrera que combata a la burguesía. Hacer de esta reserva de mujeres trabajadoras un ejército de obreras y campesinas, que combatan junto al gran ejército del proletariado, ésa es la segunda tarea, que es decisiva, de la clase obrera.
El Día Internacional de las Mujeres debe servir para hacer pasar a las obreras y campesinas de la reserva de la clase obrera al ejército activo del movimiento liberador del proletariado.
¡Viva el Día Internacional de las mujeres!
13 comentarios:
Forneo, que las mujeres (trabajadoras), en España, no están más explotadas que los hombres (trabajadores); que la esclavitud de la cocina de que hablaba Lenin no la sufre ni una sola mujer en España a día de hoy; que hay miles de hijas de puta y aspirantes a serlo que explotan tanto como el que más; y que no se puede transformar una manifestación del poder y para el poder del capital en su contrario.
Los comunistas (hombres y mujeres) deberían estar "disparando" contra esta manifestación, que sólo sirve para asentar más aún el poder del capital.
Lo que habría que hacer es convertir toda manifestación en un combate, toda guerra en revolucion, toda protesta en un paso más hacia la toma del poder. Los comunistas tienen la obligación no de luchar contra las protestas equivocadas o no, sino de ponerse a la cabeza de todas, porque son la vanguardia, para dirigirlas hacia el objetivo de acabar con la dictadura del capital. La opcion no es, ni mucho menos, quedarse en casa cagandose en todo mientras la burguesia se hace con el control de los movimientos sociales, conflictos laborales o de la cultura. Si no nos gusta la huelga, hay que salir a la calle y aprovecharla agitando la bandera roja y gritando fuerte que la lucha es contra el capital, sean mujeres u hombres los que lo defienden o representan.
"España mañana será lesbiana"; "Madrid será la tumba del machismo"... Forneo, los comunistas, contra esta chusma, disparan, porque ésta es la puerta entreabierta al fascismo.
No hay adjetivo "proletario" que enmiende toda esta negación del marxismo y de la historia gloriosa del movimiento obrero. Hay que organizar contramanifestaciones contra esta mierda burguesa que nos está envenenando. Y, como desgraciadamente ya es tarde, tendrá que ser el fascismo que viene el que nos obligue a sangre y fuego a rearmarnos con el fusil del marxismo y a arrojar toda esta basura feminista a la cloaca burguesa.
Esto es bazofia, Forneo, y en lugar de ponernos al final de sus happenings con nuestras Zetkin, Kollontai o Luxemburgo, tenemos que ponernos enfrente, con ellas, sin duda, pero sobre todo con Marx y Engels, con Lenin y Stalin.
Lo que es una pena es que no se haya visto ni una bandera roja. Me refiero a los paises donde el comunismo es una caricatura de si mismo, y donde los comunistas prefieren o vestirse de morado o quedarse en casa gritando contra la pared. Lo de ser vanguardia consiste tambien en luchar por ganarse a la gente en la calle, aprovechando cualquier movilizacion para atraer y dirigir hacia la lucha de clases a los trabajadores, hombres o mujeres, engañados por el bombardeo mediático del capital. Lo de "ganarse a la reserva" es una idea clara y concreta de Stalin de aplicación todavía hoy (a pesar de que sea dificil por las circunstancias).
https://elpais.com/politica/2019/03/12/actualidad/1552422470_906307.html
España, pocilga trasera del imperialismo.
Evaristo, con las ideas claras sobre feminismo, homosexualismo, animismo y demás mierdas:
https://www.youtube.com/watch?v=fzbKL7jNfJs&pbjreload=10
A mí Evaristo me parece un tio de puta madre, pero en cuanto a ideología y enseñanzas prácticas prefiero a Stalin. El problema del primero es que echa verdades como puños y gilipolleces en la misma olla: por ejemplo, eso de que la extrema izquierda y la extrema derecha se juntan en un círculo es el argumento típico que va diciendo por ahí cualquier facha. No es que sea facha el pobre Evaristo, sino que, como gran parte e los anarcos, tienen ideas muy buenas pero poco método y organización de las ideas. Todo comunista lleva un anarquista dentro, pero la diferencia es que el primero estudia y no habla al pedo, sino que intenta analizar, estudiar, reflexionar y utilizar el método dialéctico sin dejarse llevar por las palabras o el cabreo.
Como dije, prefiero a Stalin y su defensa del día de la mujer trabajadora, como un acto esecial e imprescindible dentro de la lucha de clases (como es la lucha contra toda explotación).
Tienes razón, Forneo, en que Evaristo, en ocasiones, derrapa por los conocidos despeñaderos anarquistas de la libertad individual, etc. Pero eso no es lo importante aquí. De lo que se trata es de determinar el papel del feminismo (y resto de patrañas de la izquierda realmente existente) y ahí Evaristo acierta de lleno.
De hecho acierta mucho más que tú, Forneo, que pretendes que la situación actual de la mujer es la descrita por Lenin y Stalin hace muchas décadas, algo que no es cierto. ¿Qué mujer que tú conozcas está sujeta a la esclavitud de las sartenes? Ninguna, Forneo, ninguna.
Y sí, yo también prefiero a Stalin y Lenin como ideólogos. Están a años luz de Evaristo. Pero como intérprete de la realidad, acierta más Evaristo que tú sin tener las referencias que tú tienes. Eso se llama instinto, olfato. Y eso es algo que los anarquistas tienen. Por eso hay que escucharles.
Conozco muchas chicas sujetas a la esclavitud de la prostitución. Precisamente Rumania, donde vivo, es el primer suministrador de esclavas sexuales a Europa Occidental. También conozco a mujeres que reciben menos dinero por el mismo trabajo que hace un hombre... Si, hombres también explotados. Pero es ni Evaristo ni tú entendéis realmente el problema, pues no se trata de que la mujer tenga o no más derechos, sino de que todos los trabajadores están explotados, y las mujeres, en ocasiones, doblemente (no en la cocina, pero sí en otros ámbitos). Por no hablar, que a veces tampoco se ve más allá de las fronteras mediáticas, de la situación de la mujer en otras regiones y culturas (y no me refiero solamente a la religión islámica). Comparto con Evaristo que las feministas (moradas) está perdidas, y que no ven el mundo y sus problemas, la esencia de sus propios problemas como trabajadores y mujeres, más que a través del cristal de los medios; pero es que tampoco parece que el propio Evaristo tenga una mirada global sobre el problema, puesto que no solo se trata de exigir y luchar contra el hambre en el mundo, que también, sino igualmente de trabajo, sexo, raza, etc... pues la explotación de clases tiene más de una expresión, aunque todas se expliquen esencialmente a partir de la misma raiz: la propiedad de los medios de producción y la distribución de esta. En todo caso, hay que superar el eurocentrismo y eso de pensar que vivimos en el ombligo del mundo, y que las cosas son tal y como nos parecen más aca de nuestras narices.
Y yo conozco a muchos hombres que están peor pagados que las mujeres por el mismo trabajo, en Google, por ejemplo, la compañía capitalista por excelencia (ver noticias recientes ocultadas en los medios burgueses). Y conozco a muchos hombres que están explotados en trabajos a los que las mujeres ni se acercan. Y ya estamos en el tema del la burguesía feminista que encandila tanto a la izquierda antimarxista: hombres contra mujeres. No trabajadores contra explotadores (y explotadoras del trabajo ajeno).
Y está muy bien eso de luchar contra el eurocentrismo (aunque no sepa muy bien qué es), pero, ¿no te parece que suena también a eurocentrismo eso de ser antieurocentrista? Lo digo porque las mujeres que más luchan por ser miembras de un consejo de administración son las europeas, que, parece, tienen que enseñar a las zopencas del resto de planeta cómo deben liberarse.
Hay muchas mujeres explotadas y muchos hombres explotados. Y hay pocos exploradores machos y hembras. Ese es el campo de batalla. Mientras lo tergiverséis con películas de origen burgués seguiremos en la mierda.
E insisto, es más profundo lo que dice Evaristo (a pesar de las cantinelas anarquistas) que trasponer a día de hoy una cita de Lenin relativa a la situación de las mujeres de antaño.
Las películas burguesas de los pobres animalitos, las pobres mujeres, los pobres homosexuales, la pobre Tierra, el pobre clima, el pobre lenguaje, etc. allanan el camino al fascismo porque desarman ideológicamente a la clase obrera, cuyo único enemigo es el maldito capitalismo.
Eurocentrismo es creer que más allá de Europa no pasa "ná". Precismente, las manifestaciones feministas en la India, por ejemplo, han sido bastantes más masivas que las moradas de Madrid, aunque no salen por la tele y el esfuerzo de buscar información es una utopia que ya no alcanca ni a los puristas del comunismo. Y en India la explotación de la mujer, como la de los dalit, o como la de los niños o como la de los trabajadores en general es bastante más evidente (en el sentido físico incluso) que en nuestro centro del mundo del "mejor no me muevo y vocifero con la cerveza en la mano.
El hecho de denunciar que las Panteras Negras fue un movimiento procapitalista porque era principalmente afroamericano (obviando su caracter de clase y sin intentar si quiera ver la forma de que, en el caso de que no existiera, atraerle hacia él), el hecho de criticar a las trabajadoras que salen a la calle convocadas por el movimiento reformista morado, porque, por otro lado, los comunistas machitos critican toda acción "feminista", o la critica a los trabajadores catalanes porque tambien participa en el movimiento, o incluso lo lidera, la derecha catalana, muestra lo poco comunistas que son hoy los comunistas, que anteponen la critica a la accion.
Saludos Rojos
Sobre el comentario anterior: cuando digo "crítica" no me refiero a la "autocrítica", sino al chisme de taberna y al "mejor que no se mueva nadie que quizás también me tenga que mover yo".
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