Honduras convertida por los golpistas en "nido del narcotráfico"

El golpe de estado contra el presidente Manuel Zelaya perpetrado en Honduras en junio de 2009 está dando sus frutos, como demuestran las afirmaciones de Ramón Custodio, Comisionado Nacional para los Derechos Humanos del pais centroamericano.

Zelaya entre Raul Castro, Chavez y Lugo (este último también echado del poder por
un golpe de estado reciente)

Así, las políticas del presidente Porfirio Lobo, impuesto tras la pantomima de elecciones con las que los golpistas intentaron legitimar la nueva situación política,  y las del Gobierno de EE.UU., han cimentado las bases para que Honduras se convierta en el nuevo “nido del narcotráfico”.

“La política exterior (del Gobierno de Porfirio Lobo) está equivocada porque (Estados Unidos) nos condicionan la ayuda, nos limitan a ejercer el derecho a la soberanía del espacio aéreo, terrestre y marítimo”, manifestó el Comisionado Nacional para los Derechos Humanos, Ramón Custodio.

Custodio, tras recordar que Honduras primero fue país de paso y ahora se han descubierto por lo menos dos laboratorios de producción de estupefacientes, denunció que este país se había convertido en “nido del narcotráfico, de la narcopolítica y de la impunidad absoluta de la corrupción”.

Honduras todavia tiranizada por el golpismo

Lamentó también que la ayuda económica de EE.UU. para que Honduras combata el narcotráfico sea “casi nula”. “Nosotros no tenemos la culpa de estar en la ruta del gran mercado mundial de la droga”, agregó.

El defensor de DD.HH. hondureño se basó en datos obtenidos en una encuesta recién realizada, según la cual, 6 de cada 10 hondureños creen que los narcotraficantes ejercen mucha o algún grado de influencia tanto en su municipio como en el departamento donde residen.

Desde el inicio de este año, las autoridades hondureñas han decomisado cerca de 6.000 kilógramos de cocaína mientras que, en 2011, esta cifra superó las 22 toneladas, según fuentes de la Secretaría de Seguridad.

Cerca del 90% de las drogas ilícitas que ingresa a EE.UU., atraviesan por Centroamérica, según afirman autoridades estadounidenses.

Como demuestra una simple mirada sobre la injerencia norteamericana en el mundo, donde un marine pone los pies suele crecer el negocio de la droga. Y Honduras (como también sucede en Colombia o, por ejemplo Afganistan, por citar solo algunos de los paises donde EEUU ha impuesto su dominio para convertirlos en nidos de la droga y otros crímenes lucrativos para los grandes mafiosos de Wall Street), tras el golpe de estado que echó del poder a Manuel Zelaya, que estaba llevando a cabo un gobierno en el que se fomentaba la soberania nacional frente a la injerencia imperial, ha seguido, ante la pasividad complice de la comunidad internacional, la misma suerte.

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