Rudolf Schlichter, Bertold Brecht, 1926 |
muchos otros se desmoralizan,
pero su valor crece.
Él es quien organiza la lucha
por ese centavo del salario, por el agua del té
y por el poder dentro del Estado.
Le pregunta a la propiedad:
¿De quién eres?
Le pregunta a las ideas:
¿A quién sirven?
Allá donde reine el silencio
hablará él.
Y donde impere la opresión y se hable del destino
dirá él ambos nombres.
Allá donde él se siente a la mesa
se sienta también el descontento.
La comida sabe mal
y se reconoce que el cuarto es estrecho.
Allá donde lo persigan
allá estará la rebelión y allá de donde lo echen
quedará la intranquilidad.
1 comentario:
Tal vez el término "elogio" sea más apropiado que "alabanza", cargado éste de indeseables connotaciones religiosas.
Salud!
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