La BBC sobre las draconianas leyes hipotecarias españolas y la lucha contra los deshaucios

"Cientos de familias en España son desahuciadas todos los días, tras retrasarse en los pagos de la hipoteca, y bajo las draconianas leyes españolas tienen que seguir pagando su préstamo, incluso después de que la casa haya sido embargada. Su principal fuente de apoyo es una decidida mujer de Barcelona: Ada Colau".

Captura de pantalla de la BBC

Así comienza un amplio reportaje publicado este miércoles por la BBC británica sobre el drama de los desahucios en España, con especial referencia a la figura más conocida de la Plataforma de Afectados por la Hipoteca, Ada Colau.

La autora, la periodista Lucy Ceniza, ha visitado varias familias afectadas, cuyos casos relata, y ha estado presente en asambleas de la PAH. "Asisto a una asamblea en un amplio garaje en una zona en decadencia de Barcelona. La gente desesperada busca soluciones y escucha atentamente a los oradores y garabatean notas...", relata.

El reportaje cuenta el funcionamiento de la plataforma y las movilizaciones que realiza, y analiza también las "draconianas" leyes hipotecarias que rigen en España y la postura intransigente de los bancos.

"España tiene algunas de las leyes hipotecarias más duras. La gente tiene que seguir pagando sus hipotecas, con cargos por intereses y sanciones, incluso después de que han sido desalojadas y sus casas han sido recuperadas por el banco... Cargan con deudas que nunca podrán escapar... y muchos se han suicidado", afirma.

La especial avidez de la clase política y de los bancos españoles,
es conocida en todo el munco

El reportaje carga contra las "draconianas" leyes hipotecarias y la intransigencia de los bancos, pero olvida citar a otros importantes responsables de la situación: la mercenaria clase política española que, por devolver favores y prebendas a las mafias bancarias rechazan una y otra vez en el Parlamento las propuestas de cambiar la situación, en contra de los intereses de los ciudadanos. 

Y es que la derecha española (y aquí podemos incluir naturalmente tanto al Partido Popular como al Partido Socialista, además de a la mayoría de los partidos parlamentarios) nunca ha tenido en cuenta otro interes, ni el nacional, ni el de sus supuestos representados, ni mucho menos el de los trabajadores a costa de los que viven, más que el de su propio bolsillo (o, tal y como se va conociendo poco a poco, el de sus cuentas en Suiza).