La determinación de la Corea Democrática por defender su soberanía frente a los intereses imperialistas de uno y otro lado ha dejado boquiabiertos a los grandes líderes mundiales. A pesar de las sanciones aprobadas por unanimidad por el Consejo de Seguridad de la ONU y de la campaña generalizada de los medios de propaganda del capital en todo el mundo criminalizando al país socialista, Corea ha seguido adelante y ha acojonado a sus enemigos con un ensayo termonuclear subterráneo que ha mostrado su verdadero poder atómico.
Todas las potencias y agentes imperialistas han puesto el grito en el cielo, desde Estados Unidos, pasando por la OTAN, China, Rusia o la U.E., entre otros, por no citar a la dictadura surcoreana o Japón o al resto de sus vasallos -eslabones más bajos de la cadena imperialista-. Curiosamente, las más ruidosas plañideras contra la Corea libre son las principales potencias nucleares de la actualidad, algunas de ellas, como Estados Unidos, únicas en usarlo contra la población civil en una matanza en masa que todavía ante la que todavía no se ha hecho justicia.
Parece, pues, que ven ya muy complicado que, finalmente, Corea del Norte acabe como Irak o Afganistán, o como la propia Siria, víctima de una guerra de muchos años como campo de batalla de intereses ajenos. Tampoco parecen tener fácil que acabe como Libia, en la que, recordemos, Muhamad Al-Gadaffi renunciara a desarrollar un programa nuclear propio confiando en las potencias occidentales y orientales y, finalmente, sufriría terribles consecuencias por ello en 2011, bajo las bombas de la OTAN y con el silencio cómplice de Rusia y China.
Corea del Norte parece que ha aprendido la lección muy bien, y sabe que no puede tener ni "un tantico así" de confianza en los imperialistas, en los que piensan más en sus intereses económicos (los de la clase dominante, la capitalista), y que van a recurrir a cualquier medio para beneficiarlos, que en la legalidad internacional o en los intereses de los pueblos o la clase trabajadora.
Así que, pese a la oposición aparentemente firme y unida del imperialismo mundial, en realidad Corea del Norte los tiene a todos acojonados.
¿Seguirán otros pueblos el ejemplo de Corea, rechazando la estafa de la tan de moda, como falsa, "multipolaridad" actual, y recordando aquello de que son los pueblos los que se liberan a sí mismos?
3 comentarios:
Desempolvé la tele y me tragué varios telediarios para ver que decían sobre Corea. Es increíble como se manipula la información y la historia y como se añaden opiniones de la propia cadena: las noticias son una auténtica vergüenza, pero a pesar de todo la gente se las traga y se lo cree tal como lo oye. ¡Pero si es evidente que no te están informando, te están ofreciendo una opinión!
Creo que si no se renuncia a ver la tele durante unos meses (como mínimo) uno no se da cuenta de en qué se ha convertido.
Un saludo y Bien por Corea.
Menos mal que nos queda algún referente frente a la borreguez internacional.
¡Que tome nota Irán! Hoy Corea del Norte es el único país libre del planeta gracias a su capacidad de resistencia a la presión de sus enemigos imperialistas... y de sus "amigos" igualmente imperialistas. Nadie en el ámbito de las relaciones internacionales puede actuar con unos márgenes de libertad tan amplios como Corea del Norte, ni siquiera EEUU. Y ello es posible gracias a su capacidad disuasoria.
Frente a los pequeños países calificados frecuentemente como "antiimperialistas", obligados, en realidad, a elegir entre los hunos y los hotros de las grandes potencias antiimperialistas, Corea enseña el auténtico camino hacia la independencia y la paz.
Publicar un comentario