Después de las alertas llegadas desde Alemania, hoy la prensa británica ha alertado también sobre la cercana bancarrota del estado español, que parece ser esta al caer. El diluvio que le espera a España parece hará recordar al que está sufriendo Grecia como un chirimiri de nada.
El "Daily Mail" alertó ya acerca de la exposición de la economía y los bancos británicos que "han prestado grandes sumas de dinero en España en los últimos años". El corresponsal del diario en Bruselas destaca que las cuentas públicas españolas están "envenenadas", aunque también incide que tanto la Comisión Europea como el Banco Central Europeo ya están en movimiento para proceder al rescate de otro PIGS.
El periódico británico destaca con preocupación que España supone una amenaza mucho mayor para Europa y para el Euro que Grecia, puesto que su PIB supone el 12% de la eurozona, frente al 3% de peso de la economía helena, por lo que la U.E. se está echando a temblar de lo que el futuro cercano traerá.
Parece que la preocupación es tal, que "los Estados miembros no quiere esperar" ni siquiera hasta la cumbre que tendrá lugar el jueves en la capital belga para comenzar a actuar.
Que la U.E. venga en rescate de España no es, ni mucho menos, una buena noticia. Ya sabemos que el término "rescate" es un eufemismo que esconde las verdaderas intenciones de las "ayudas", y que como sucede en el caso de Grecia, no son mas que una forma de continuar haciendo negocio.
Además, estas "ayudas" no vienen nunca solas, y por supuesto no son altruistas, sino que como en Grecia o Rumania, dos paises que han recibido préstamos de "rescate" para "salvar" al pais de la ruina, el lote incluye obligaciones y exigencias para los trabajadores, es decir, mas recortes de salarios, pensiones, y de gastos sociales, ademas de, evidente, la devolución de la deuda con intereses.
La pregunta es, ¿Reaccionaran los hasta ahora bien domesticados españoles como los trabajadores griegos ante el saqueo que les espera?
Lo cierto es que, como ha sido hasta ahora, la solución ante la bancarrota de España será qué las consecuencias las pagen los ciudadanos y trabajadores, mientras los causantes del desastre, especuladores, banqueros, constructores, y empresarios, seguiran ganando dinero a su costa, como hasta ahora.
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