A pesar de que los norteamericanos y sus cortesanos consideran el 11 de septiembre un dia de dolor inmenso y una de los atentados mas horribles de la historia, la realidad es que los yankees no suelen ser las victimas de este tipo de masacres, sino, mas bien, sus ejecutores.

En Iraq, y despues de saberse con certeza absoluta que la invasion estaba basada en mentiras fabricadas por la CIA (algo que no ha parecido importar a los asesinos) las victimas superan el millon y medio desde marzo de 2003, mientras el ejercito norteamericano anuncia su retirada sin poder pacificar el pais, pero bien controlados sus recursos (para lo que ha dejado alli la cifra nada despreciable de 50.000 soldados).
A la vez, y para no perder la practica criminal, el genocidio continua en Afganistan, donde las victimas aumentan cada dia como si se tratara de una competencia para superar a las anteriores masacres, y el presidente, premio nobel de la paz, continua empeñado en seguir con el genocidio.

Afortunadamente, y tras la nueva cinica celebracion de este 11 de septiembre (y sabiendo perfectamente, a pesar de tanta manipulacion, que se trato de otra escusa para iniciar el saqueo de Afganistan, como las armas de destruccion masiva de Sadam, como el hundimiento del Maine, como el incidente del golfo de Tomkim, como el peligro japones a finales de la SGM), torres mas altas han caido, y tarde o temprano la humanidad se librara, como ha pasado una y otra vez a lo largo de la historia, de este imperio del terror (y esperemos que esta vez no se deje someter por ningun gobierno que no sea en nombre y en pro del bienestar de todos los seres humanos, de la verdadera democracia y su necesaria convivencia con el respeto a los derechos basicos de los individuos y de los pueblos, es decir, por el Socialismo).
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