A pesar de la campaña propagandística de los medios de información tras el último atentado de Bruselas, que repite las formas y los mensajes de otros previos, pretendiendo criminalizar a la población inmigrante (a pesar de que los autores de los atentados sean europeos), la realidad es bastante diferente a la que nos pintan, Los datos demuestran que el 87% de las víctimas mortales en atentados perpetrados por organizaciones yihadistas entre 2000 y 2014 se produjeron en países donde la mayoría de la población es musulmana, según un estudio de la ‘Global Terrorism Database’, que recoge los datos de 15.181 ataques realizados por grupos islamistas en todo el mundo. El número de víctimas mortales asciende a unas 72.000 personas. De ellas, 63.000 lo fueron en países de mayoría musulmana, y solo 248 murieron en Europa occidental.
La mitad de los ataques de organizaciones islamistas se llevaron a cabo en países que han sufrido graves conflictos bélicos, en los que la presencia militar y los intereses de las multinacionales occidentales son causa y fin principal, como Irak (27%), Afganistán (15%) y Pakistán (9%). En estos tres países la religión musulmana representa a más de un 96% de la población
Los atentados de este martes en Bélgica reivindicados por el ISIS, donde varias explosiones han acabado con la vida de al menos 30 personas, representan una cruel pero mínima parte de los atentados cometidos por organizaciones de corte yihadista alrededor del mundo. Estos grupos defienden el integrismo islamista, que defiende la adaptación de la vida política a los mandatos religiosos más fanáticos del Islam. Eso, al menos, en teoria. En la práctica parecen defender y buscar objetivos bastante relacionados con los intereses de los gobiernos occidentales y las multinacionales que los controlan.
En resumen, en los países de Europa Occidental, sede de los grupos economicos que se pueden considerar los principales causantes de la violencia terrorista en el mundo, solo se cometieron 22 atentados entre 2000 y 2014, que suponen un 0,1% de los 15.818 actos terroristas cometidos por grupos yihadistas en todo el mundo. En los ataques realizados en países europeos murieron 248 personas, la mayoría en las explosiones del Metro de Londres en julio de 2005, con 56 fallecidos, y el 11M en Madrid, con 192 muertos.
La mitad de los ataques de organizaciones islamistas se llevaron a cabo en países que han sufrido graves conflictos bélicos, en los que la presencia militar y los intereses de las multinacionales occidentales son causa y fin principal, como Irak (27%), Afganistán (15%) y Pakistán (9%). En estos tres países la religión musulmana representa a más de un 96% de la población
Los atentados de este martes en Bélgica reivindicados por el ISIS, donde varias explosiones han acabado con la vida de al menos 30 personas, representan una cruel pero mínima parte de los atentados cometidos por organizaciones de corte yihadista alrededor del mundo. Estos grupos defienden el integrismo islamista, que defiende la adaptación de la vida política a los mandatos religiosos más fanáticos del Islam. Eso, al menos, en teoria. En la práctica parecen defender y buscar objetivos bastante relacionados con los intereses de los gobiernos occidentales y las multinacionales que los controlan.
En resumen, en los países de Europa Occidental, sede de los grupos economicos que se pueden considerar los principales causantes de la violencia terrorista en el mundo, solo se cometieron 22 atentados entre 2000 y 2014, que suponen un 0,1% de los 15.818 actos terroristas cometidos por grupos yihadistas en todo el mundo. En los ataques realizados en países europeos murieron 248 personas, la mayoría en las explosiones del Metro de Londres en julio de 2005, con 56 fallecidos, y el 11M en Madrid, con 192 muertos.