Que los representantes políticos desprecian a sus votantes es algo de lo que hay ejemplos constantes y que, si hacen dudar de algo, es de la capacidad racional del electorado, y no del clarisimo poco caracter democrático del sistema parlamentario actual. Aunque, sin embargo, es curioso como a veces el descaro de aquellos riza el rizo, como en el caso del tema que nos ocupa: la reforma de la constitución para fijar un déficit público máximo.
En un periodo en que la legitimidad de la clase política esta siendo cuestionada por gran parte de los ciudadanos, que están saliendo a las calles precisamente para pedir mas democracia, ante las limitaciones de la que sufrimos, los líderes del sistema bipartidista, herederos ambos del Movimiento Nacional Franquista, aunque intenten dar apariencia de diversidad de opciones para que los subditos piensen que pueden elegir el futuro del pais votando a uno o a otro, han pactado un cambio de la norma básica sin hacer el mínimo esfuerzo en preguntar a la "ciudadania".
Zapatero y Rajoy se han reido de los españoles de nuevo (cómo si fuera la primera vez) y se han pasado sus reivindicaciones por el mismo sitio que se las pasaron sus partidos cuando Franco impuso la transición que llevo a la situación actual. Al fin y al cabo, ambos, a pesar de luchar mediaticamente por hacerse los representantes preferidos de los españoles, sirven a los mismos amos, y estos les imponen la agenda e, incluso, cuando tienen que discutir y cuando parecer amiguitos.
Desde el anuncio del gran acuerdo "nacional" entre los dos partidos (las dos caras de la misma mafia que controla el pais), la red y algunos partidos politicos se han movilizado para evitar que la reforma se apruebe sin preguntar a los ciudadanos. Asi que a las 18:00 horas de hoy se ha celebrado la manifestación que desde Atocha hasta la Puerta del Sol llevara el lema "No a esta reforma de la Constitución. Ni un paso atrás".
Lamentablemente, lo mas seguro es que, aunque se logre la celebración del referendum, que es un derecho eminentemente democratico y solo por eso merece la pena exigirlo, y como sucedió en las ultimas elecciones municipales, la mayoria de los ciudadanos, mas preocupados por ver la telenovela de la mañana o el partido del fin de semana, volveran a votar lo que les dicen los dos grandes partidos que, como sabemos, son la voz y el servidor de la gran empresa.
El problema no es que se haga una reforma constitucional prohibiendo el endeudamiento del estado. Es decir, limitando el gasto publico y, por lo tanto, debilitando el gasto social y dejando a la empresa privada mas hueco para hacer negocio con los derechos fundamentales de los ciudadanos: educacion, sanidad, cultura, etc.... Esto no es mas que la inclusion en la norma básica de las politicas que se han venido llevando a cabo con los ultimos gobiernos del PSOE y del PP, es decir, la de la destrucción del estado y la entrega de este a manos de los grandes saqueadores privados. Lamentablemente, esta politica no fue decidida por los politicos españoles en el poder, pues hace tiempo que España no tiene soberania alguna para decidir nada realmente importante.
Realmente el problema viene de lejos. Ni Rajoy ni Zapatero son los grandes genios economicos que han decidido que los recortes del estado de bienestar son el camino correcto y lo mejor para España. Estos solo son servidores y marionetas en manos de los grandes intereses privados, y aunque fueran supuestamente elegidos por los españoles (gracias a los grandes prestamos de los grandes bancos) no hacen mas que intentar ganarse el futuro en una gran corporación perteneciente Ibex35, como miembro de su Consejo de Administracion, tras su retirada politica, como han hecho sus antecesores. Ellos son los ejecutores de politicas diseñadas por los grandes magnates de las corporaciones multinacionales, y los que son sus representantes politicos mas poderosos: el gobierno de Washington y el de Bruselas.
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Amigos para siempre |
El problema, como digo, viene de lejos. Por ejemplo, de la aprobación del Tratado de Lisboa que, entonces, cuando los indignados no lo estaban tanto (aunque la situacion mundial y economica era tan capitalista como ahora), nadie o pocos pidieron que se aprobara por referendum. Este tratado impone un verdadero golpe de estado contra la democracia, contra la soberania de los estados y de los pueblos, al prohibir que un gobierno emita moneda propia, o simplemente cree moneda, a traves de su Banco Central, y para despues ir devolviendola en forma de prestamo sin intereses al propio Banco Central; es decir, a los propios ciudadanos.
El Tratado de Lisboa impone, al contrario, que todo prestamo tenga que hacerse de la banca privada, y que esta sea la unica que pueda financiar la creacion de moneda, aumentando la suma del prestamo con los intereses del prestamo, por supuesto. El artículo 104 de Maastricht (que se convirtió en el artículo 123 del Tratado de Lisboa) dice lo siguiente: «Los Estados ya no pueden obtener préstamos de sus bancos centrales».
Por supuesto que el articulo esta redactado obviando las consecuencias de su aplicación. Si el artículo 104 dijera que «Los Estados ya no pueden crear moneda. Ahora tienen que pedir préstamos a las instituciones privadas pagando a estas intereses que los llevan a la ruina y que encarecen tremendamente las inversiones públicas, pero que hacen felices a los ricos que viven de sus rentas, a los propietarios de los fondos de préstamos», quizás la cosa seria diferente. Pero para eso estan los medios de propaganda (en el neolenguaje orwelliano llamados "medios de información").
Así que el problema no es que los estados se endeuden o no, sino con quien. Mientras antes el exceso de deuda podria solventarse con la creación de moneda propia para devolver el prestamo a los bancos centrales, teniendo siempre esa salida, ahora el endeudamiento siempre tendrá que hacerse a bancos privados y, por lo tanto, convertirse en un monto mucho mayor de lo razonable al incrementarse con los intereses de la usura (lo que el mismo neolenguaje orwelliano llama hoy "interés bancario").
Incluir el tope de deuda en la Constitucion es simplemente hacer evidente lo oculto, poner un límite a las propias trampas que Zapatero y Rajoy (e incluso algunos de los partidos que hoy se oponen a la medida) aceptaron sin pedir en aquel caso referendum alguno. Es mas: la mayoria de los que hoy piden mas democracia, que quizas por aquel entonces no habian visto tocado su bolsillo, se quedaron en casa tan contentos.
Desde este blog apoyamos la celebración del referendum para decidir si hay que reformar la constitución para limitar la deuda pública o no, pues se trata de un derecho democratico que no deberia ser despreciado por los representantes de los bancos (en neolenguaje: nuestros representantes). Aunque visto lo visto, y teniendo en cuenta la profunda domesticación que sufre la ciudadania europea, y en especial la española, como paso con la OTAN, al final la mayoria dirá si al amo y este se saldrá, como casi siempre, con la suya.
Aunque también, y ya que estamos, creo que debemos exigir otros cambios en la Constitucion, ya que pedimos un referendum. Por citar solo unos cuantos: si queremos o no un parásito como jefe de estado por la gracia de Franco; si incluimos la vivienda como derecho fundamental que todo español debe tener garantizada por nuestro estado; si todos los españoles son iguales ante la ley, hombres y mujeres, y si alguno puede tener impunidad judicial; si la "indisolubilidad de la nacion" la tienen que decidir los pueblos que la integran o ha de ser impuesta por ley; y, sobre todo, si el capital y la propiedad tiene que ser la base del sistema economico-juridico-social en vez del trabajo, o si los beneficios de unos cuantos tienen que protegerse mas que las necesidades de la mayoria.
En resumen: no se trata de defender o no el "estado de bienestar", que no fue mas que un engañabobos para que los españoles creyeran en la esencia democratica de este postfranquismo. Los españoles siempre tuvimos menos salarios, mas trabajo, menos y de peor calidad servicios publicos, y peores pensiones que la mayoria del resto de europeos. De lo que se trata es de pedir de verdad democracia real (nada que ver con DRY), es decir, que sean los propios ciudadanos, es decir, los productores de la riqueza, los que decidan como se gestiona esta, y donde los capitalistas y demas saqueadores y parasitos, esten obligados a trabajar o pasen el resto de sus dias en campos de trabajo forzados. Se trata de luchar dia a dia contra un sistema criminal, que basa el "bienestar" de unos pocos sobre el malestar de la mayoria, y en la cual os mayores beneficiados en todos los casos son los que se aprovechan del trabajo o del sufrimiento de los demas para mantener y aumentar sus privilegios sin dar palo al agua (es decir, sin producir, y solamente por el control de los medios de producción a traves del trabajo de los demas, derivando la mayor parte del beneficio hacia su propio bolsillo).
Se trata de luchar todos los dias, momento a momento, contra el capitalismo y exigir que los referendum no sean un derecho que nos otorguen para cosas mas o menos "importantes", sino que seamos los trabajadores, en los consejos de fabrica, de escuela, de barrio, en las asambleas municipales, y cada uno de nuestros dias, a traves de la participacion activa, qué hacer con el producto del trabajo colectivo y cómo gobernar nuestro pais.
Claro que para eso esta la OTAN y criminales del estilo. En caso de que los medios de propaganda fallen (cosa que esta lejos de suceder en Europa), y los ciudadanos se empeñen en vivir en democracia real, mas o menos imperfecta, sus aviones siempre estaran dispuestas a liberarnos y hacernos volver al "orden correcto" de las cosas (cueste lo que cueste en vidas humanas).