Un miliciano republicano rinde homenaje a Galdós frente a la casa dónde viviera en Madrid, en la calle del Olivo, hoy Hilarion Eslava (1937) |
Las movilizaciones sociales eran cada vez más frecuentes en Europa, como también en España, y en pocos años se iba a producir la Revolución Soviética, que cambiaría para siempre la historia del mundo y demostraría que realmente los productores podrían prescindir de los parásitos que habían vivido a su costa a lo largo de la historia . Pérez Galdós, con su gran sensibilidad artística, entendía a la perfección la necesidad de la lucha y de la organización obrera para poder acabar con la injusticia de la explotación de clase y construir una sociedad sin explotación del hombre por el hombre.
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1º de mayo de 1911
La clase productora sabe ya que el origen de su dependencia económica no proviene de causas naturales e inmutables, sino artificiosas, creadas por la codicia de una clase social hábil y rapaz y mantenidas por la ignorancia de la mayoría de los hombres durante siglos: sabe también que el remedio a esos males estriba en organizar la sociedad sobre bases más equitativas, y ha puesto manos a la obra con todo el ardor de los convencidos.
Para realizar tan elevada misión, la clase trabajadora necesita capacitarse debidamente, y lo primero que le hace falta es adquirir o conservar su robustez física y acrecentar sus energías intelectuales. A este fin impónese en primer lugar acabar con el derroche de fuerzas que supone una larga jornada de trabajo, que al par que extenúa el cuerpo le priva de tiempo para dar satisfacción a las nobles potencias del espíritu, contribuyendo así a perpetuar la ignorancia y la miseria.Por eso la jornada de ocho horas y la fijación de un mínimo de salario figura en primer término entre las reclamaciones formuladas hoy a los Poderes constituidos. Pero téngase en cuenta que si los trabajadores quieren obtener por medio de una ley dicha jornada, no renuncian por eso a ir reduciendo las horas de trabajo, y arrancar de los patronos directamente cuantas concesiones puedan: es decir, que no lo aguardan todo de la acción gubernamental, sino que desean conquistar por su esfuerzo propio cuantas ventajas les sea dable obtener.
Este año, la Manifestación tiene en nuestro país algunos puntos más en su programa. Trátase de reclamar del Gobierno la revisión del proceso Ferrer y demás sentenciados a muerte por los sucesos de Barcelona, la derogación de la ley de Jurisdicciones y que no se realice en África ningún género de intervención armada ni de conquistas territoriales.
A los socialistas debemos los republicanos la infusión de la más pura sangre política: la firmeza en las ideas y el tesón irreductible para sustentarlas en todo tiempo y ante todas las resistencias que oponen los Poderes, petrificados en la rutina; la pureza moral, la fidelidad en los compromisos y la derechura inflexible en los propósitos.
Como en todas estas reclamaciones tiene sumo interés la clase trabajadora, nadie debe faltar hoy a la Manifestación. Cada acto de estos que celebramos es un paso que damos en el cambio de nuestra emancipación. La gran familia socialista española, en perfecta unidad de fines y sentimientos con el Socialismo mundial, celebra su Fiesta solemne el 1º. De mayo, risueño día que en el esplendor de la primavera parece simbolizar la esperanza de un año feliz.
En la hermosa confraternidad de este día, los obreros se sienten aliviados de la pesadumbre de su malestar presente, y dilatan su pensamiento y su alma toda hacia el ideal de Justicia y de Reparación social, que se vislumbra en las nieblas de un porvenir cada día menos lejano.A los socialistas debemos los republicanos la infusión de la más pura sangre política: la firmeza en las ideas y el tesón irreductible para sustentarlas en todo tiempo y ante todas las resistencias que oponen los Poderes, petrificados en la rutina; la pureza moral, la fidelidad en los compromisos y la derechura inflexible en los propósitos.
Aliados somos para un determinado fin. Séales dichosa, séales fecunda su activa y tenaz propaganda.
¡Adelante, amigos!
Benito Pérez Galdós".
1 comentario:
Benito Pérez Galdós (Las Palmas de Gran Canaria, 10 de mayo de 1843-Madrid, 4 de enero de 1920)1 fue un novelista, dramaturgo, cronista y político español.
No Emilio, como figura al comoenza de la entrada del blog.
Saludos.
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