
Ciertamente, como muestran cada vez más datos, España es ya un país subdesarrollado, en el que miles de jóvenes son forzados por motivos políticos (la economía siempre es política) a huir de su país. Así, la última encuesta publicada por Randstat , el 65% de los profesionales españoles de entre 18 y 24 años estaría dispuesto a cambiar de país por un puesto de trabajo (le ha faltado añadir, sea cual sea, porque en casa ya no hay). El porcentaje anterior supone un aumento de once puntos porcentuales con respecto a 2011.
Es la cruda realidad de una dictadura capitalista en vías de subdesarrollo.
Este estudio muestra también que cuanto más joven es el profesional, más predisposición existe a dejar el país. El 63% de los jóvenes entre 25 y 34 años desea salir de España en busca de un empleo que en casa no tienen.
Concretamente, el 75% de los profesionales españoles piensa que los países con más oportunidades se encuentran en Europa, especialmente en Alemania, donde el 48% de los encuestados cree, ilusos ellos, que es "el país oportunidades". Francia (7%) e Inglaterra (6%) son los otros dos países europeos preferidos.
Por otra parte, Estados Unidos y Brasil son los países que ofrecen más oportunidades de trabajo en América (7%).
Por último, la encuesta de Randstad constata que los profesionales con estudios universitarios son los que muestran mayor predisposición a la movilidad internacional (66%), seguidos de los trabajadores con títulos de Bachillerato (62%) y de Formación Profesional (59%).
Por supuesto que la clase política, ejecutivos de los intereses de las grandes corporaciones, no ven la situación con preocupación, e incluso la ven como algo positivo, producto del falso mito del libre mercado. La realidad se que los trabajadores españoles, a los que las decisiones de los gobiernos bajo presión de la U.E. y la gran empresa, han visto como son privados de sus trabajos, sus salarios y sus derechos en España, y solo tienen la opción de buscarse las habichuelas emigrando.
Claro que, como ha sucedido a lo largo de la historia, en todas las dictaduras del capital, aquello del "sueño americano" o "el aventurero que se enriquece" son solo cuentos chinos para convencer a la mano de obra barata para que marchen, como cerdos al matadero, a los países que ofrecen trabajo; un trabajo donde ganarán bastante menos que los trabajadores locales, y en los cuales servirán, principalmente, no para vivir mejor que en casa, sino para enriquecer a los grandes delincuentes económicos del país de destino (y en muchas ocasiones, como ha sucedido ya en los países nórdicos, serán presionados por las autoridades locales para que se vayan a su país porque allí también sobran, igual que en casa).
1 comentario:
un buen analisis desdel prisma marxista pesimista http://nonosvamosnoshechan.blogspot.de/
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