La realidad es muy diferente, aunque si que es cierto que el golpe de estado de los militares fascistas, los movimientos obreros tomaron mas protagonismo y, tanto por el gran apoyo que tenía la Federación Anarquista Ibérica como por la ayuda militar de la URSS.Ese estado revolucionario que provocaron Franco y sus apoyos, que llevaron a cabo una guerra civil tras el fracaso del golpe gracias al sostenimiento y alianza con el ejercito nazi y los fascistas italianos, aniquiló tras su victoria los restos del movimiento obrero, haciendo que el destino final de muchos militantes fuera la cárcel, el exilio, el cementerio, o las miles de fosas comunes desperdigadas por toda España que todavia siguen sin excavar.
Las consecuencias fueron la eliminación de toda una generación militante y el descabezamiento de toda la generación de intelectuales antifascistas, que conllevaría la práctica desaparición de la organización obrera. Solo el Partido Comunista persistió en su lucha, desde el exilio o en el interior, aunque en su liderazgo ya se estaba organizando la traición y el pacto con los vencedores. Lo que surgiría después en la Transición, con la complicidad del mismo Partido Comunista dirigido por el mercenario Santiago Carrillo, no seria mas que una continuación del sindicalismo vertical impusto por Franco, en algun caso recuperando siglas antiguas y en otros creando otras nuevas y usando banderas rojas que no serian mas que anzuelos para captar la confianza de los trabajadores para que fuera mucho mas facil controlarlos dentro del corral donde los querian los grandes empresarios y fortunas.
Frente a
esta triste realidad, hoy agitada por las protestas provocadas por la oleada de recortes y saqueos de derechos y bienestar perpetrada por la clase capitalista contra los trabajadores, aprovechando los veinte años de ausencia de la práctica de sistema alternativo y de poder obrero, querer contraponer la II República
como una balsa de libertad y defensa de lo trabajadores, es en el mejor de lo
casos, una ingenuidad irresponsable, víctima de la propaganda mediatica e historica, y en el peor de los casos, maledicencia y un insulto a los miles
de trabajadores muertos y encarcelados no solo a manos del asesino Francisco Franco y sus bárbaros acólitos (esos que todavia siguen hoy controlando el chiringuito), sino que también en la II República.
Si la Constitución republicana de 1931 comenzaba definiendo a España como una "República de los Trabajadores" (eso si, de toda clase, no solo de clase obrera, como si los capitalistas hubieran dado un palo al agua en alguna ocasión de la historia), la persecución a la militancia obrera, a los que producian la riqueza que otros se apropiaban, fue durísima durante toda la II República, al menos hasta el golpe de estado fascista y el estallido de la Guerra Civil. Claro que se produjeron algunas modernizaciones necesarias, pero que beneficiaban bastante mas a la burguesia que lideraba los partidos politicos republicanos que a los propios currantes.
Veamos algunos datos sobre la represión a los trabajadores durante esa II República que hoy parece ser la panacea que todo lo cura y que en realidad nunca dejo de ser (salvo, en todo caso, durante la guerra) igual que la España actual, una dictadura del capital pero sin rey:
- Por algo seria que la fuerza
obrera más importante del momento, y la más grande que ha tenido España en toda su historia, la
CNT (más de millón y medio de afiliados), junto a los sectores obreristas de la UGT (e incluso, aunque parezca a estas alturas de la historia increible, del PSOE),
se opusieron tanto a la monarquía como a la república.
Lo que querian entonces, como organizaciones defensoras de la emancipación obrera, del final de la explotación de la clase capitalista sobre los que producian la riqueza, era la revolución, la unica forma posible de alcanzar la tan cacareada y vaciada de contenido actualmente "libertad". El problema que preocupaba a los obreros entonces no era el de Monarquía o
República, ni el qué nación era la suya o si eran necesarias las autonomias, sino acabar con el Capitalismo a traves de una Revolución Social, Politica y Economica.
- Militantes de la CNT como Cipriano
Mera, Melchor Rodríguez, Ascaso, Garcia Oliver, Juan Peiró (que luego sería
ministro)… estuvieron ¡¡¡ más de 30 veces encausados cada uno y encarcelados
por la II República !! Y sucedió con todos los gobiernos.
- Muchos
trabajadores murieron en las cárceles de la República, especialmente tras
la huelga revolucionaria de 1934 (con gobierno del partido radical) donde participaran miles de obreros socialistas.
- La ley de
vagos y maleantes, que metió a miles de obreros en la cárcel por hacer huelgas,
o por trabajar más de la cuenta, la impulso el gobierno de Azaña, no en el "bienio negro". Bajo esa ley
se encarcelaba a los obreros en paro que queriendo trabajar, cogían sus
herramientas y se metían en las obras a trabajar. Al exigir su jornal, les
encarcelaban bajo esa ley de vagos y
maleantes.
- La matanzas
de campesinos y obreros pobres de Casas viejas (1933), Castilblanco (diciembre 1931)… se
perpetraron en la República con gobiernos del PSOE y de Izquierda Republicana.
- Las fuerzas del orden de la II Republica, mataron
a más de mil obreros en Asturias en 1934 con la consigna de disparar a la
barriga, bajo el mando de Franco, el que ya estaba practicando el papel que luego llevaria hasta la maxima esencia, el de verdugo.
- Cuando se
produce el golpe militar del 18 de julio de 1936 (el gobierno del Frente
Popular llevaba gobernando desde febrero de 1936) miles de obreros se encontraban en la
cárcel. Por ejemplo los obreros madrileños encarcelados tras la huelga de la
construcción, que incluso prolongarían hasta septiembre del 36. El propio
militante libertario Cipriano Mera, que luego se convertiria en un loado general del ejercito republicano, sale de la cárcel el 19 de julio (no en febrero cuando ganó el Frente Popular).
- En 1932, en pleno
bienio “izquierdista” de la II
República, el periódico Solidaridad
Obrera, el de mayor tirada y el más característico del movimiento
obrero por aquellos años, sufrió 32 suspensiones gubernamentales.
¿Esa fue la República de los trabajadores? Para nada: como hoy, como durante el franquismo, precisamente esos trabajadores son los que menos cuentan para la toma de decisiones politicas y economicas, aunque sean los que sostienen con su trabajo el pais y, por supuesto, los privilegios de la clase improductiva y parasitaria.
Por eso, ahora que la crisis ha hecho salir a flote la verdadera cara del rey y de la Casa Real, heredera del sanguinario franquismo, como la propia Constitucion de 1978, conviene recordar que no basta con quitar a un corrupto parasito de su cargo para que los trabajadores por fin sean los dueños de la riqueza que crean: hay que cambiar radicalmente el sistema. Y como sabian bien los trabajadores que vivian sometidos bajo la II República, eso solo se consigue a través de una Revolución, pues los criminales capitalistas no van a permitir que se les acabe el chollo de vivir a costa de los demás por las buenas, y como han demostrado a lo largo de la historia, serán capaces de cualquier crimen para continuar disfrutando de crecientes privilegios sin verter una gota de sudor.
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1 comentario:
Hay que felicitarte porque es muy importante que estas cosas se reconozcan por la gente de izquierdas, de lo contrario continuará la manipulación que saca a la calle a tantos izquierdistas vociferando por otra república como la que hubo, no como la que debería haber. Vamos, que está claro que el hecho de que el estado se organice con uno u otro nombre, no cambia mucho su esencia, ni la explotación de los trabajadores. La república debe ser popular y autogobernada por obreros, no por una élite que antes haya sido la camarilla de la corte y antes la del dictador.
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