18 de enero de 2010

General Pinochet: ¿el regreso?

El empresario multimillonario Sebastián Piñera, candidato de la derechista Coalición por el Cambio, se convirtió ayer en Presidente electo de Chile al derrotar en la segunda vuelta de las elecciones a Eduardo Frei, candidato de la Concertación de Partidos por la Democracia, por un 51,61% de los votos a un 48,38%.

El proximo 11 de marzo Michelle Bachelet traspasará la banda presidencial a Piñera, conocido empresario multimillonario, dueño de LAN Chile, que hizo su fortuna durante la dictadura de Pinochet, al que ha alabado en varias ocasiones. Su triunfo representa una resurrección del pinochetismo, que dejo como Franco en España atado y bien atado el futuro politico y economico de Chile.

De hecho, podriamos decir que, como también en España sucede con Franco, Pinochet nunca murio realmente, y el triunfo de Piñera solo significa la consecuencia natural de una transición que nunca fue tal cosa, sino simplemente la continuación de lo mismo con rostros aparentemente mas amables.

El triunfo del partido de Piñera es un paso atras en el avance hacia la democracia chilena, aunque lo tuvo facil debido a los pocos pasos adelante que los gobiernos de la Concertación se atrevieron a dar bajo la mirada del general genocida y su dominio de los puntos claves de la sociedad.

Ahora, la Constitución de 1980 (impuesta por Pinochet y los suyos -entre ellos Piñera-) continuará vigente y no será reformada; el movimiento obrero seguirá sufriendo el Código del Trabajo pinochetista (impuesto en 1980 por el ministro de Trabajo del gobierno Pinochet, José Piñera, hermano del presidente electo), que dificulta el derecho a la huelga e impide la negociación de convenios colectivos; los casi 800 represores de la dictadura actualmente procesados tendrán garantías de impunidad; la empresa pública del cobre será probablemente privatizada; el millón de chilenos que vive en el exterior no conquistarán su derecho al voto (que seria casi total para los candidatos de la izquierda); la ley electoral binominal no será reformada; el pueblo mapuche seguirá siendo masacrado en la Araucanía (región donde, por cierto, ayer Piñera obtuvo el 57,51% de los votos, y donde por cierto tambien Bachelet siguio aplicando una politica represiva digna del general asesino); y, en definitiva, los grandes capitales podrán seguir acumulando riquezas en uno de los países del mundo donde la brecha entre clases sociales es más acentuada.

El nuevo presidente de Chile es muy amigo de José María Aznar, quien le visitó en Chile en septiembre y calificó de “trascendentales” unas elecciones que se celebran cuando la mayor parte de países de Sudamérica tienen gobiernos progresistas o revolucionarios. Piñera, que como vemos es todo un peligro si le juzgamos por el refran popular que dice "dime con quien andas y te dire quien eres", es también admirador del presidente colombiano Álvaro Uribe, otro genocida que aplica en Colombia la ley de dispara y luego pregunta y que mantiene bajo su control el negocio del narcotrafico en Colombia.

En definitiva, un triunfo del capital chileno y de la politica del saqueo impuesta por Estados Unidos en 1973 usando com marioneta al general Pinochet. Hoy el nuevo peon del liberalismo marca Washingon en Chile es otro pinochetista, de aquellos que no utilizaran el deporte de lanzar disidentes al mar desde un avion porque de momento no hace falta.

Y un fracaso de los partidos de izquierda chilenos, especialmente el socialista, que en su codicia de poder aceptó todas las imposiciones de Pinochet y que, una vez en la presidencia, no supo o no quiso reformar el pais y profundizar en aquella democracia que los norteamericanos y los mercenarios chilenos (maestros de los que ahora han vuelto al Palacio de La Moneda) cortaron de cuajo -¡y cómo me suena ésto al socialismo español¡-

http://www.rebelion.org/noticia.php?id=98891

3 comentarios:

ana maria parente dijo...

Lo que pasa con CHILE es que a la clase media le fuè muy bien con el sistema de PINOCHET puès este hombre era un salvaje pero honesto para el dinero.
En Argentina le tenemos asco a ultraizquierda y ultraderecha al mismo tiempo porque la masa media-o sea aquellos que ni se fijan que le pasa al vecino-tambièn LES ROBO LA DICTADURA.
Aunque la izquierda post Allende ha sido moderada ,caso el candidato que tenìan hijo del DR FREI MONTALVA ,incluso no socialista sino democristiano.
Ni a los chilenos ni a los argentinos nos gusta la izquierda tamposo.
Somos afectos a la social democracia SI ESTA REALMENTE SE FIJA EN MANTENER EL COLCHON SOCIAL PARA TODA LA POBLACION pero como solo les interesa la lucha de clases ni a chilenos ni a argentinos eso le resulta.

ana maria parente dijo...

En realidad el arribo de un simple Berlusconi a CHILE nos entristece a todos.
En cierta forma la culpa la tienen también ustedes puès en realidad màs enemigos que de las grandes corporaciones y sus intereses ustedes son enemigos de las clases productivas nacionales.
ASI QUE LE HACEN UN MUY BUEN FAVOR A LOS MONOPOLIOS EMPRESARIOS.

Anónimo dijo...

como si allende fue lo mejor, en la historia quedara que es el peor presidente de chile y si no fuera por pinochet seriamos mas miserables que cuba.-

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