En alguna de las fotos, los soldados habian tomado tambien recuerdos de su hazaña sacando los dientes a los cadaveres y otros “trofeos”. Probablemente esto sea lo que les espera a los libios si la intervención aerea termina convirtiendose, como es previsible, en una invasión.
En las fotos se ve el cadaver del hjo del campesino Gul Mudin, asesinado el 15 de enero de 2010. El militar que levanta la cabeza desde los cabellos puede ser Jeremy Morlock o Andrew Holmes, del llamado “Equipo de la Muerte” de Afganistán, un grupo de 12 militares estadounidenses que será enjuiciado este miércoles 23, en Seattle, por el asesinato de civiles en Afganistán.
El niño Gul Mudin era hijo de un granjero de los alrededores de Kandahar. Los soldados que lo asesinaron dijeron que los amenazó con una granada (aunque seguramente seria una pala o una hoz, o incluso un libro). El diario británico The Guardian informo que los militares mutilaban los dedos de sus víctimas y les extraían sus dientes como trofeo. Morlock negoció declarar contra sus compañeros e inculpar a su superior, el sargento Calvin Gibbs, como responsable de las matanzas, para obtener una pena reducida, quizás a 24 años de prisión.
El diario El Mundo de España dijo que después de hacerse la fotografía, los soldados detonaron una granada sobre el cuerpo y acribillaron los restos. Un ritual perverso del “Equipo de la Muerte”. Las fotos de Der Spiegel traen a la memoria las imágenes de la cárcel de Abu Ghraib, Iraq, que entre 2003 y 2006 mostraron cómo los militares de EE.UU., mercenarios contratados por Blackwater y elementos de la CIA torturaban y humillaban a los prisioneros, disfrutaban sádicamente y tomaban instantáneas. También otras de las intervenciones "humanitarias" de la ONU en Somalia, de la actitud de soldados israelís contra los palestinos, o imágenes habituales en paises donde los ejercitos formados por los yankees usaron la crueldad y la tortura como arma de guerra.
Una actitud bastante habitual en la historia de las intervenciones militares norteamericanas (y de sus complices), que ha dejado un ingrato recuerdo en todos los lugares del mundo por donde han pasado. Nos recuerda a las imagenes de la invasión nazi a la Union Sovietica, ilustradas crudamente en la película "Masacre: Ven y mira", dirigida por Elem Klimov (y es que en realidad los autores y sus métodos son practicamente los mismos).
Que los libios se vayan preparando.
http://www.rebelion.org/noticia.php?id=124961
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